En el río: un hombre pescaba de espaldas a la corriente, su cuerpo apoyado a una roca. Atrapaba un pez y lo soltaba: después lo volvía a atrapar. Repetía esta operación incesantemente.
El día que subió el nivel de las aguas lo encontraron flotando bocarriba con un extraño pez dentro de la boca.
Excelente!!! Maravilloso relato!!!
Gracias, Ernesto!